Es un orden jerárquico establecido de las cosas y personas, colocando en una posición superior a cierto tipo de hombres sobre otros hombres y mujeres, niñas y niños y ancianos, de acuerdo a un modelo hegemónico de la masculinidad, que se establece por condición económica, edad, condición de salud, orientación sexual, entre otras. Es un sistema de opresión que pretende tener un control incluso de la naturaleza y del aprovechamiento de recursos. Se institucionaliza a través, de la familia, de la economía, la iglesia y el estado.